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Actualmente la distribución del software de negocios se realiza en forma de aplicaciones que son desarrolladas y desplegadas o ejecutadas.
Como puede ocurrir en cualquier otro sector de manufactura, el desarrollo de aplicaciones puede beneficiarse de la automatización y está también sujeto al efecto de la curva de aprendizaje. Es así que los productores de software se encuentran en consecuencia en la búsqueda permanente de herramientas y plataformas que puedan acelerar el proceso de desarrollo, incrementar la calidad del producto final y reducir los costos de mantenimiento.
La proliferación de los diferentes ambientes de tecnología informática (hardware, sistemas operativos, etc. ) y arquitecturas (desktop, cliente-servidor, web, móvil) requiere implementaciones especializadas de desarrollo y despliegue. Adicionalmente las plataformas de aplicaciones están evolucionando hacia la creación de capas abstractas que permitan la separación de la lógica de la aplicación de la plataforma que la distribuye.
También podemos hablar de la existencia de un conflicto entre la búsqueda de un alto retorno sobre la inversión (ROI) en software (generalmente traducido como una extensión de la vida de las aplicaciones), y la adaptación a los cambios en constante aceleración en el entorno del negocio. Un alto ROI también se asocia frecuentemente con paquetes de software con “resistencia al cambio”, mientras que lo que los negocios en realidad están buscando son soluciones “resilientes al cambio”.
Ahora, el surgimiento de la nueva generación de aplicaciones orientadas a servicio agregará nuevas características de computación, nuevos protocolos y otros ladrillos para la construcción de aplicaciones Web. Estas aplicaciones de negocio cuentan con arquitecturas orientadas a servicio, brindan una experiencia rica y sofisticada a los usuarios, procesan reglas de negocio dentro del concepto de BPM y poseen protocolos IP, manejo de metadatos, manejo de eventos y otras características avanzadas. Así, intensifica también el desafío para los proveedores de software el incremento del número de aplicaciones provistas como servicio
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